Ciudadanos haitianos expresaron su optimismo ante la próxima llegada de la Fuerza Internacional de Kenia a su país, en un esfuerzo por frenar la violencia desatada por bandas criminales. Han hecho un llamado enérgico a las autoridades para que no negocien con los responsables del conflicto que ha azotado a la nación caribeña.
Willy Pie, residente local, manifestó su alegría ante la llegada inminente de los militares kenianos, declarando: «Ahora mismo estamos muy contentos porque mañana viene la fuerza de Kenia, no queremos ningún negocio con bandidos o con Barbecue, vamos a esperar a la Fuerza de Kenia para desbaratar esa banda».
Pierre, otro habitante de la región, señaló que las acciones de las bandas criminales han forzado a su líder, conocido como ‘Barbecue’, a buscar negociaciones con las autoridades, temiendo por su seguridad ante la llegada de las fuerzas internacionales.
En el mismo sentido se pronunció Pablo Lois, quien expresó el sufrimiento prolongado del pueblo haitiano bajo el dominio de las bandas criminales. «Esperamos que las autoridades kenianas apliquen todo el peso de la ley y encarcelen a todas las personas involucradas en la opresión del pueblo», dijo Lois.
Cristian Joseph, otro residente, destacó la grave situación de inseguridad que enfrenta el país: «Uno no puede negociar con ninguna de esas bandas, a esa gente lo que hay es que llevarlos presos o matarlos».
Renao Jean, representante de una organización local, expresó el deseo unánime de la comunidad de que las tropas internacionales logren pacificar Haití y crear un entorno propicio para el crecimiento económico y la recuperación nacional.
El despliegue de la fuerza policial de Kenia, programado para el 25 de junio, forma parte de una misión respaldada por la ONU para enfrentar la creciente violencia de pandillas en Haití, un problema que ha afectado gravemente la estabilidad y la seguridad en el país.
Mientras tanto, Jimmy Chérizier, alias ‘Barbecue’, líder de las pandillas locales, ha solicitado un diálogo con el gobierno haitiano como un intento de evitar un conflicto directo con las fuerzas internacionales.
Este movimiento internacional representa un esfuerzo concertado por restaurar la paz y la seguridad en Haití, proporcionando un rayo de esperanza para sus ciudadanos que anhelan un futuro libre de violencia y temor.