Estados Unidos ha alertado a la población latinoamericana sobre los intentos de Rusia de “manipulación” a través de una presunta campaña de desinformación en español, la cual busca respaldar la invasión de Ucrania y menoscabar la imagen de Washington en la región.
James Rubin, encargado de la oficina antipropaganda del Departamento de Estado, expresó su preocupación en una entrevista por la dificultad de Ucrania para conseguir apoyo de los gobiernos latinoamericanos y desea que Moscú cese en su intento de “engañarlos”.
Rubin explicó que Rusia ha planificado una campaña de desinformación por todo el continente para manipular a los votantes latinoamericanos a través de la difusión de información falsa y propuestas irrazonables.
Según la Administración de Biden, Rusia está orquestando esta campaña desde Chile, buscando involucrar a medios y figuras influyentes de toda América Latina para difundir su propaganda, ocultando su intervención directa.
El contenido es generado en Rusia y luego distribuido por agentes en la región en español y portugués mediante medios locales, aparentando ser información independiente.
Rubin afirmó que los mensajes difundidos por el Kremlin en América Latina buscan “justificar lo injustificable”, refiriéndose a la invasión rusa de Ucrania. Estos mensajes acusan a Kiev de poseer armas biológicas, entre otras afirmaciones infundadas.
El funcionario subrayó que Rusia decidió invadir a Ucrania y cometer atrocidades, y busca hacer creer que Estados Unidos es responsable de esta guerra, una táctica rechazada por la Administración estadounidense.
El Departamento de Estado ha contactado a los gobiernos de la región para alertar sobre esta presunta campaña de desinformación rusa y anima a periodistas y lectores a identificar intentos de manipulación.
Rubin destacó la importancia de cuestionar información inesperada sobre Rusia y reflexionar sobre las narrativas presentadas para evitar ser influenciados por presuntas estrategias de manipulación de Rusia en la región latinoamericana.
