Chilpancingo, Guerrero – En un escalofriante hallazgo, los cuerpos sin vida de once personas fueron encontrados la noche del miércoles en una camioneta abandonada en la autopista Del Sol, que conecta la Ciudad de México con el puerto de Acapulco. Entre las víctimas se identificaron preliminarmente dos mujeres y dos menores de edad.
La camioneta, una pick up blanca de doble cabina, presentaba manchas de sangre y desprendía un fuerte olor fétido, lo que alertó a las autoridades tras un reporte a la línea de emergencias. Elementos de la Fiscalía General del Estado (FGE) y policías ministeriales llegaron al sitio para asegurar el vehículo y trasladarlo a sus instalaciones, donde realizan diligencias bajo estricta vigilancia.
Esta mañana, la FGE emitió un comunicado señalando que los cuerpos aún no han sido identificados. Un equipo especializado en identificación humana realiza los trabajos científicos bajo el protocolo de perspectiva de género para determinar la identidad de las víctimas, que incluyen a dos mujeres y nueve hombres, entre ellos dos menores de edad.
Contexto de Violencia y Desapariciones
El hallazgo ocurre en un momento crítico para Guerrero, estado afectado por la violencia del crimen organizado. Días atrás, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) inició un operativo especial para localizar a 16 comerciantes desaparecidos a finales de octubre en la sierra de Guerrero, presuntamente a manos del grupo delictivo Los Ardillos. Hasta el momento, no se ha confirmado si los once cuerpos hallados guardan relación con este grupo de desaparecidos, el cual incluye cuatro menores de edad.
Un Estado Marcado por la Violencia
Este nuevo caso se suma a la larga lista de incidentes violentos en Guerrero. Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, México tiene actualmente 106,809 personas desaparecidas, muchas de ellas en el estado de Guerrero. Además, en semanas recientes, figuras políticas han sido blanco de violencia en el estado, incluyendo el asesinato del exalcalde oficialista Aurelio Méndez Rosales y la decapitación del alcalde opositor Alejandro Arcos, ambos en octubre.
Este trágico hallazgo subraya la grave situación de inseguridad en Guerrero, donde la violencia parece no dar tregua.
