Esta semana, los Piratas de Pittsburgh han anunciado un cambio significativo en su alineación defensiva, trasladando al infielder dominicano Oneil Cruz del campo corto al jardín central. Esta decisión ha sido respaldada por el mánager de los Bucaneros, Derek Shelton, el gerente general Ben Cherington y el propio Cruz, quienes han expresado su acuerdo con la nueva estrategia.
La pregunta que surge ahora es: ¿puede esta transición ser exitosa?
El reciente cambio no es sin precedentes. El año pasado, el también dominicano Fernando Tatis Jr., de los Padres de San Diego, logró un Guante de Platino tras pasar de ser campocorto a jardinero central. Cruz ha mencionado que planea contactar a Tatis para solicitarle consejos y ha mostrado una actitud positiva hacia el nuevo rol.
«Si ése es el movimiento, voy a tratar de dar lo mejor de mí todos los días para convertirme en uno de los mejores,» declaró Cruz tras conocer la noticia.
Las cualidades físicas de Cruz podrían ser determinantes para su éxito en esta transición. Su velocidad de sprint y la fuerza de su brazo son notables; ha promediado 95.6 millas por hora en el 5% superior de sus lanzamientos, situándose como el sexto brazo más potente entre los jugadores de posición en las Grandes Ligas. En comparación, los únicos jardineros centrales que superan este registro son Brenton Doyle de los Rockies (97.7 mph) y Colton Cowser de los Orioles (95.9 mph).
El juego en los jardines presenta desafíos distintos en comparación con el cuadro interior, particularmente en el uso del brazo. Mientras que los infilders tienen tiempo para ajustar su tiro, los jardineros pueden aprovechar su impulso para lanzar con mayor potencia. Los lanzamientos superiores de Cruz en su rol actual ya están a la par con los mejores jardineros centrales, y es probable que mantenga esa ventaja en su nuevo puesto.
«Lo único con lo que nos vamos a encontrar con Cruz es que tiene un arma en su brazo y a veces querrá usarla,» comentó Shelton. «Habrá ocasiones en las que probablemente intentaremos moderarlo un poco. Prefiero que sea así, en vez de tener que empujarlo en la otra dirección.»
Con esta transición, los Piratas esperan no solo aprovechar las habilidades defensivas de Cruz, sino también adaptarse a una nueva estrategia que podría definir el rumbo del equipo en la próxima temporada.
