A media mañana de ayer, el vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, confirmó que el presidente Luis Abinader viajará a Estados Unidos junto a su familia para participar en actividades familiares durante la festividad. Este viaje implica que la República Dominicana quedará bajo el mando de la vicepresidenta Raquel Peña, quien ha asumido esta responsabilidad en múltiples ocasiones anteriores.

Publicidad
Desde que asumió el cargo en agosto de 2020, Peña ha demostrado ser una figura de confianza para el presidente Abinader, participando en la gestión de importantes temas y crisis que ha enfrentado el gobierno. En sus 38 viajes al extranjero, el presidente ha delegado en ella el control del Poder Ejecutivo, así como su representación en inauguraciones y actos oficiales, incluyendo reuniones del Consejo de Ministros y vistas públicas del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM).
Con el anuncio de la salida del mandatario, la vicepresidenta Peña ha tomado medidas inmediatas para asistir a las personas afectadas por las recientes lluvias en la provincia de Samaná. A través de un comunicado de prensa, informó sobre el redoble y agilización de los esfuerzos gubernamentales para mitigar los efectos de las inundaciones en las comunidades.
«Vamos a disponer un trabajo que llamo en paralelo. El primer trabajo es una asistencia rápida e inmediata para todas las personas que han sido afectadas de una forma más directa», expresó Peña, detallando que el segundo enfoque se centrará en la reconstrucción de viviendas y la habilitación de vías de comunicación.
A partir del 25 de diciembre, se implementará un programa de contingencia que abordará las necesidades básicas de la población en las comunidades inundadas, mientras se realizan las reparaciones estructurales en la provincia.
Durante su visita a Samaná, Peña aseguró a las familias afectadas que el gobierno central está a su lado, reafirmando su compromiso de apoyo en estos momentos difíciles.