Washington, D.C. – En un anuncio contundente tras asumir su segundo mandato, el presidente Donald Trump declaró el fin de la ideología de género en las políticas gubernamentales de los Estados Unidos. Durante su discurso inaugural, Trump afirmó: «A partir de hoy, la política del gobierno de los Estados Unidos será que solo hay dos géneros: masculino y femenino».
La declaración marca un giro significativo en la postura oficial del país respecto a temas de identidad de género, revirtiendo políticas previas que reconocían y protegían a personas no binarias y transgénero bajo categorías de género más inclusivas.
El anuncio ha generado una intensa reacción tanto a nivel nacional como internacional. Grupos defensores de los derechos LGBTQ+ han expresado su preocupación por el impacto de esta política en la comunidad transgénero, mientras que los partidarios del presidente celebran lo que consideran un regreso a «valores tradicionales».
Este cambio de política refleja una de las promesas clave de Trump durante su campaña, alineándose con una agenda conservadora que ha sido central en su plataforma política.
Se espera que la implementación de esta medida enfrente desafíos legales y protestas de diversos sectores de la sociedad que consideran la medida discriminatoria y regresiva.
Esta noticia seguirá desarrollándose mientras el país observa cómo esta política afecta las dinámicas sociales y legales en Estados Unidos.
