El ex presidente de Estados Unidos y actual precandidato republicano, Donald Trump, expresó el miércoles su apoyo a la autonomía legislativa de cada estado en cuanto al tema del aborto. Esto surge tras la entrada en vigor de una nueva ley en Florida que prohíbe las interrupciones del embarazo después de las seis semanas.
Durante un mitin de campaña en Freeland, Michigan, un estado crucial en las elecciones, Trump elogió públicamente a los jueces del Tribunal Supremo que revocaron en 2022 la protección federal al aborto. Esta acción abrió la puerta para que los estados con tendencias conservadoras pudieran restringir la práctica del aborto.
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«Ahora los estados pueden decidir; eso es lo que quería todo el mundo desde hacía 50 años y lo logramos», expresó el ex presidente republicano, quien durante su mandato nominó a tres de los nueve jueces del Tribunal Supremo. Trump reconoció que puede haber descontento debido a que algunos estados podrían adoptar leyes más progresistas de lo que los conservadores desearían, pero reiteró que esta descentralización es la mejor opción.
Asimismo, Trump recordó a sus seguidores que es crucial «ganar las elecciones», ya que de lo contrario, el tema del aborto volvería a estar en manos del Gobierno federal.
La ley recién estrenada en Florida, gobernada por los republicanos, prohíbe el aborto a partir de las seis semanas de gestación, momento en el cual muchas mujeres aún no son conscientes de su embarazo.
Por otro lado, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, realizó una campaña en el estado de Florida el mismo miércoles, donde responsabilizó a Trump de la promulgación de esta ley y aseguró que el ex presidente republicano pretende extender la prohibición del aborto a nivel nacional si regresa a la Casa Blanca.
